Descripción
For more than thirty years-half his life-he was obsessively devoted to investigating Everything in the natural world. Nothing escaped his interest-how our eyes see, why the sky is blue, what forces build mountains, how light travels, where water comes from, and-most fascinating of all to Leonardo-the inner workings of the human body. Nothing stopped him. It was illegal to dissect human corpses, so he did autopsies in secret, even devising a clever way to slice through eyeballs (notoriously squishy!). Scrupoulously researched and juicily anecdotal, Kathleen Krull’s portrait of Leonardo will not only change children’s ideas of who he was, but also what it means to be a scientist.
Durante más de treinta años, la mitad de su vida, se dedicó obsesivamente a investigar todo en el mundo natural. Nada escapó a su interés: cómo ven nuestros ojos, por qué el cielo es azul, qué fuerzas construyen montañas, cómo viaja la luz, de dónde viene el agua y, lo más fascinante de todo para Leonardo, el funcionamiento interno del cuerpo humano. Nada lo detuvo. Era ilegal diseccionar cadáveres humanos, por lo que hizo autopsias en secreto, incluso ideando una forma inteligente de cortar los globos oculares (¡notoriamente blandito!). Escrupulosamente investigado y jugosamente anecdótico, el retrato de Leonardo de Kathleen Krull no solo cambiará las ideas de los niños sobre quién era él, sino también lo que significa ser un científico.